El milagro de Bukele

 

El presidente Nayib Bukele y El Salvador han sido protagonistas de un cambio notable, destacado por la significativa reducción de la criminalidad, especialmente la tasa de homicidios. Aunque su enfoque ha sido criticado por la implementación de medidas controvertidas, como el estado de excepción, el resultado en términos de seguridad es innegable. La tasa de homicidios ha pasado de 106 por cada 100,000 habitantes en 2015 a tan solo 2.4 en 2023, situando a El Salvador como uno de los países más seguros de América.

Esta mejora en la seguridad ha tenido un impacto significativo en diversos aspectos de la sociedad salvadoreña. Los pequeños negocios, que antes sufrían extorsiones y amenazas, ahora experimentan un cambio positivo, enfocándose en el crecimiento y la eficiencia en lugar de la seguridad. Aunque estas medidas han venido acompañadas de críticas por posibles violaciones de derechos humanos, el respaldo de la población a Bukele sigue siendo sólido, con un 90% de apoyo.

No obstante, algunos economistas consideran que la situación económica no es tan positiva como la que presenta Bukele. Más de US$100 millones se destinaron a la compra de bitcoin, que se adoptó como moneda de curso legal en noviembre de 2021. Sin embargo, esto representa solo una fracción de los fondos públicos utilizados para fomentar el uso de la criptomoneda.

El desarrollo de la aplicación Chivo Wallet, la instalación de cajeros automáticos que en su mayoría no funcionan, un bono de US$30 para los ciudadanos mayores de 18 años, propaganda y eventos internacionales fueron financiados con recursos públicos. Economistas, como Óscar Picardo y Lourdes Molina, expresan su preocupación por la falta de transparencia y critican que en un contexto de pobreza extrema e inseguridad alimentaria, destinar fondos públicos a esta especulación tiene un alto costo social. Argumentan que estos recursos podrían haberse utilizado para garantizar derechos básicos de la población, como el acceso a la alimentación o un ingreso digno.

Además, algunos economistas consultados por BBC Mundo resaltan la falta de transparencia en las acciones del gobierno, cuestionando el uso de fondos públicos en la estrategia bitcoin. Saifedean Ammous, presuntamente asesor económico de bitcoin para el gobierno, celebra el aumento de valor de las reservas salvadoreñas de la criptomoneda, pero otros economistas consideran que el enfoque debería centrarse en necesidades más inmediatas de la población.

Bukele ha defendido su estrategia de bitcoin y ha criticado a instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI), que advirtió sobre los riesgos de la criptomoneda para El Salvador. El presidente ha subrayado la independencia económica que el bitcoin podría brindar al país, ofreciendo un activo de reserva apreciable con el tiempo y un fondo de liquidez global. A pesar de las críticas y la falta de consenso, Bukele mantiene su popularidad entre la población salvadoreña.